El concepto de Crowdshipping sigue siendo algo bastante alternativo y novedoso, aunque espero que algún día sea tan habitual como compartir coche.
Básicamente, se trata de una alternativa al transporte tradicional de objetos (empresas de mensajería), donde dos personas llegan a un acuerdo para transportar algo, haciendo uno de ellos de «carrier«. Imagina que compras algo en el otro extremo del planeta y alguien lo puede transportar para ti, en vez de pagar los costes de envío que pueden llegar a ser muy significativos sobre el precio final.
En una entrada anterior hablaba sobre la aparición de nuevos actores en este micro-segmento de la economía colaborativa, que por cierto no para de crecer. Este vídeo, explica perfectamente el concepto y evidencia que este servicio peer to peer despierta gran interés.
Y no sólo resulta interesante para una pequeña startup que da sus primeros pasos. La compañía de logística DHL, acaba de lanzar una app mediante la cual los ciudadanos pueden aprovechar sus trayectos diarios para entregar el paquete al cliente de la compañía, desde el punto de recogida de la empresa hasta el lugar que ambos acuerden.
Vaya, parece que cuando una empresa multinacional copia un servicio a pequeñas startups que intentan prosperar, es que algo se mueve en el mundo del Crowdshipping.
Startup Liquid 